Mi apuesta para este verano: Desconexión digital y conexión conmigo y contigo.
Queridas, cómo estáis? Madre mía! que días de calor tan intensos estamos pasando!! Con estas temperaturas no apetece nada salir, el calor y el sol te dejan ko! Yo siento que estoy más cansada, lenta, con esa nebulosa mental que me quita claridad. No sé si os pasa, que además sientes que eres menos productiva y eso te bloquea más!
En estos días y en esos momentos que te parece que no puedes más, lo que yo hago, y te invito a que pruebes tú también, es escuchar al cuerpo. Siento que vivimos rodeadas de pantallas, filtros y exigencias que muchas veces nos desconectan de lo que realmente somos. En este contexto, el verano puede convertirse en un espacio sagrado para volver a nuestra esencia. El calor, la luz, la naturaleza y el tiempo libre de las vacaciones nos invitan a respirar más lento, a soltar rutinas pesadas… y también a mirar nuestra belleza desde otro lugar: más auténtico, más real, más nuestro.
Desde nuestro salón creemos que el verdadero autocuidado no comienza en el espejo, sino en cómo nos sentimos por dentro. Hoy queremos compartir contigo una reflexión y algunas ideas para usar el verano como excusa perfecta para reconectar contigo y con tu belleza natural, también a través del cuidado del cabello.
No se trata de «no cuidarse y de no hacer nada», ni de seguir otra moda disfrazada de minimalismo. Hablar de belleza natural es hablar de respeto, de escucha, de permitirnos ser y mostrarnos como realmente somos.
¿Y si aprovechamos el verano para desconectar un poco?
Vivimos hiperconectadas. Revisamos el móvil al despertarnos, subimos fotos, comparamos nuestra imagen con otras. ¿Y si este verano te propones un pequeño descanso digital?
Como dejar de luchar hacia el canon de belleza perfecta, imposible para nuestro cuerpo o cabello, que siempre tiene que estar perfecto, y empezar a escucharnos, honrarnos y agradecer cómo somos.
Permitirnos descansar, no maquillarnos durante unos días o los que nos apetezca, nada de peinados tensos. Podemos aprovechar para lucir nuestras ondas naturales e incluso abrazar nuestro frizz!!
Porque menos productos no significa menos cuidado, sino más conciencia de lo que necesitamos, donde lo sentimos y que podemos hacer para honrarnos.
Podemos dejar el móvil aparcado, incluso proponernos reservar unas horas al día para disfrutar al máximo de lo que nos ofrece el verano, el tiempo de vacaciones, lo que nos muestra la vida cuando levantamos la vista de la pantalla!
Salir sin filtro. Que nos dé el sol en la cara y el viento en el cabello. Hacernos una foto, solo para ti, no para subirla. Que nos recuerde lo libre que nos sentimos ese día.
Observar nuestro cuerpo y cabello en el espejo sin juicio. ¿Cómo está? ¿Qué necesita? ¿Cómo habla de ti hoy?
La desconexión digital no es aislarse del mundo, es reconectar contigo.
Puedes cuidar de ti, de tu cuerpo y de tu cabello como ritual de reconexión
El verano es ideal para simplificar rutinas, aprovechar el disfrute y la escucha personal como un momento sagrado. Te comparto algunas ideas que se me ocurren para transformar tus cuidados del día a día en un pequeño ritual de conexión:
Respira profundamente antes de comenzar cualquier actividad. Lo sé, querida, parece fácil pero es un hábito que a mí se me olvida muy a menudo … y que cuando lo hago me siento tan bien! me da una calma… que me da rabia que se me olvide!! Porque respirar profundamente nos da presencia.
Las manos hablan de ti, úsalas con intención: acariciar, sentir, tocar…es una forma de decir estoy aquí para ti.
Disfrutemos de la música que nos gusta, o del silencio que a veces necesitamos, de encender una vela o incienso…podemos crear un ambiente para nosotras y que ese momento solo sea tuyo. El verano y las vacaciones pueden ser el momento para dejar de tener prisas.
Porque la belleza no es perfección, la belleza es libertad. La perfección no es lo que te hace bella. Lo que te hace bella es la forma en la que te habitas, te respetas y te permites.
Yo este verano pienso salir sin maquillar siempre que me apetezca, dejar secar mi cabello al natural, no subir nada a redes durante los días que necesite disfrutar con mi familia y no me apetezca y, sobre todo, agradecerle a mi cuerpo y a mi cabello todo lo que hace por mí.
Te animas a poner algunas de estas ideas en práctica?
Quizás descubras una parte de ti que hacía tiempo no veías.
Quizás sientas más libertad, más a ti misma, más autenticidad.
Desde nuestro salón….. Nosotras no peinamos sólo melenas. Queremos acompañar a las mujeres a redescubrirse, a mimarse, a sentirse en paz con lo que son.
Y este verano, te invitamos a dejar las prisas, los filtros, y volver a ti. Porque el verdadero lujo no está en tenerlo todo controlado, sino en saber parar.
Y dejar que tu belleza natural fluya.
Gracias por permitirme este momento contigo.
Durante los meses de calor, el cabello se expone a varios factores agresivos que puedes sentir en tu cabello:
Radiación solar intensa: puedes notar como se aclarar tu color, tanto natural como teñido.
Cloro y sal marina: resecan, debilitan la fibra capilar y pueden alterar su textura.
Viento y humedad: aumentan el frizz, el encrespamiento y la pérdida de hidratación.
Lavados frecuentes: eliminan el sebo natural, resecando cuero cabelludo y puntas.
Todo esto puede traducirse en cabello más seco, frágil, opaco y con menos vida. Pero no tiene por qué ser así si cuidamos de él con amor y conciencia.
Es posible cuidar tu cabello desde dentro con una buena alimentación y bienestar emocional. La salud del cabello no solo empieza con el champú, sino en el interior del cuerpo.
Los alimentos que nutren tu cabello en verano y que además son súper gustosos y apetecibles de comer son las frutas y verduras frescas (como sandía, melón, cerezas, melocotón, zanahoria, ensaladas por supuesto, espinacas…), grasas saludables (aguacate, nueces, aceite de oliva…), y alimentos ricos en proteínas y hierro (legumbres, quinoa, pescado azul…).
La hidratación siempre es importante!! Bebe suficiente agua, infusiones naturales…. Un cabello hidratado comienza con un cuerpo hidratado.
El equilibrio emocional cada vez es mas importante. El estrés, aunque no lo veamos, afecta el estado del cuero cabelludo y la caída del cabello. Las vacaciones son una época maravillosa para empezar a introducir espacios de calma, descanso y autocuidado. Es clave escucharnos. Un paseo al atardecer, meditar cinco minutos o simplemente respirar profundamente puede marcar una gran diferencia.
Siempre os comento en el salón que es importante proteger el cabello igual que proteges tu piel.
Así como usamos protector solar para el rostro o el cuerpo, el cabello también necesita una “barrera” frente a las agresiones del ambiente.
Y porqué no aprovechar el verano y lucir en tus outfits complementos estilosos? sombreros de ala ancha, pañuelos de algodón o seda o gorras… No solo le darás un toque a tu look si no que también reducen la exposición directa al sol.
Un buen protector capilar con filtros UV que protege sin dejar residuos agresivos también es una buenísima opción sobre todo en melenas largas con mechas y color. Busca opciones sin siliconas ni alcohol, con ingredientes como aloe vera, aceites naturales o extractos botánicos.
A mí personalmente me encanta usar aceites antes del baño: aplico unas gotas de aceite (de jojoba, argán, coco) antes de entrar al mar o la piscina ya que ayuda a crear una película protectora que reduce el daño del cloro o la sal.
Y, por supuesto queridas, menos es más. El verano es ideal para simplificar la rutina sin sacrificar el cuidado. Ya sabéis que me gusta poderos ayudar con tips, trucos o rutinas que uso yo y que sé que os pueden funcionar. Te las cuento ahora mismo:
Una limpieza suave y rápida usando champús sin sulfatos que limpien sin barrer con los aceites naturales. Si te lavas el cabello todos los días, alterna con una sola enjabonada, o aclara solo con agua o un acondicionador lavante. Es importantísimo que siempre aclares el cloro o el agua del mar de tu cabello y piel.
Los masajes en el cuero cabelludo no pueden faltar en tu rutina de lavado, si lo lavas cada día no frotes, acaricia tu cuero cabelludo. Es una manera de activar la circulación y sentir calma.
Acondicionar sin falta!! Siempre, siempre, siempre acondicionador en medios y puntas. Mi favorito es con aclarado, pero si estas de vacaciones y no cabe todo en tu maleta, hay acondicionadores sin aclarado en spray, crema o aceite. Pero no te saltes el paso de acondicionar tu cabello.
La mascarillas nutritivas una vez por semana, como norma general! Pero en verano no te la saltes !! Regálate un tratamiento profundo en casa, tu cabello te lo agradecerá.
Desenreda con mimo tu cabello, usa peines de madera o cepillos con cerdas suaves, y hazlo siempre con el cabello húmedo. En el salón siempre os digo que gotee un poco.
Permite que el cabello respire y se exprese. El verano es una gran oportunidad para liberar al cabello de tensiones y rutinas rígidas. ¿Y si lo dejas secar al aire? ¿Y si pruebas con ondas naturales o trenzas suaves en lugar de planchas?
Evita el calor excesivo intenta reducir el uso de planchas y tenacillas. El calor constante debilita la fibra capilar. Los estilos ligeros y con movimiento son ideales para aprovechar el volumen natural de tu cabello en esta época, para lucir looks más libres, recogidos suaves o melenas despeinadas con intención. Y, por supuesto, conecta con tu esencia, cada tipo de cabello tiene su historia, su textura, su forma. Honrarla y cuidarla desde el respeto es una forma poderosa de belleza. HONRA A TU MUSA INTERIOR.
En nuestro salón, creemos que el momento de cuidar el cabello también puede ser un acto de conexión personal. Te animamos a transformar tu rutina en un ritual:
Prepara el ambiente con una vela o música suave.
Respira profundamente mientras disfrutas de tus cuidados.
Agradece a tu cuerpo y a tu cabello por acompañarte en cada etapa del año.
Cuidar de ti no es una tarea más en la agenda. Es una declaración de amor propio.
Tu cabello es único, no hay una receta mágica ni universal. Lo que realmente importa es observar cómo responde tu cabello y que necesita, cómo te sientes tú y qué necesitas en cada momento. Quizá este verano tu cabello necesite más hidratación, o tal vez solo un poco más de libertad. Escucha, siente y decide desde tu autenticidad.
El verano puede ser una época de renovación para ti y tu cabello si te permites vivirlo desde el cuidado, la belleza consciente y el respeto a tu naturaleza. El cabello es más que una parte de nuestro cuerpo: es también una expresión de nuestro bienestar, nuestra historia y nuestra energía.
Desde nuestro salón holístico, te acompañamos en este camino de reconexión contigo misma, con tu esencia y con lo que te hace brillar de forma auténtica.
Gracias por confiar, por cuidarte y por permitirnos acompañarte. FELIZ VERANO!!